Otro mito menos
Aún lo recuerdo. En aquellos lejanos años ochenta mis amigos y yo teníamos nuestros deportes favoritos: estaban los futboleros, los baloncestistas y los del motor, dónde yo me incluía. Estos últimos teníamos nuestro ídolo, era el mejor, y todos queríamos ser como él. Estoy hablando de Ari Vatanen, el Finlandés Volador. Mirabas la tele y no podías evitar quedar seducido por el poderío de ese tio rubito y cara de buena persona que arrasaba en el Paris-Dakar. Y ya ves tu, llevaba un Peugeot 205 como el de tu vecino. Sólo que detrás de los dorsales, la decoración del sponsor y cuatro alerones, estaba la brutalidad de una preparación grupo B, que en aquellos años era la barra libre en especificaciones técnicas del mundial de rallyes.
Pasan los años y le pierdes la vista. Y cuando uno vuelve a tener noticias, resulta que son decepcionantes. El colega Ari, cansado de calores en el desierto del Teneré, abandonó esto del motor y se metió en la
política. Vamos, que es eurodiputado. No me lo imaginaba en las filas de los míos, evidentemente. Con que fuera centrista ya me quedaba contento. Naranjas de la China, el tío forma parte del Partido de la Coalición Nacional, bastante derechoso, con una historia nada gloriosa, y homologable a los sectores mas carcas de nuestro PP. En una declaraciones a Libération, afirma que se siente representado por la política exterior de Tory Blair (no es un fallo de tipografía) y que el problema de Europa no es ni el desempleo, ni los bajos salarios, ni las políticas sociales: el Problema de Europa es la falta de amor. Es en este momento cuando me planteo si su partido es conservador puro o adopta vertientes de sectas rollos Partido Humanista, niños de Dios o Testigos de Jehová, realmente lo estoy dudando.
LLegados a esto, mejor dejar los ídolos de infancia en su estantería. Que aún resultará que Carlos Sainz es de Fuerza Nueva y yo pidiéndole autógrafos en la salida del Rally Montecarlo de 1989.
Como siga así el asunto, entre las niñas de ayer y nuestro finlandés de hoy, voy a pensar que todos los rubitos son fachas.
Pasan los años y le pierdes la vista. Y cuando uno vuelve a tener noticias, resulta que son decepcionantes. El colega Ari, cansado de calores en el desierto del Teneré, abandonó esto del motor y se metió en la
política. Vamos, que es eurodiputado. No me lo imaginaba en las filas de los míos, evidentemente. Con que fuera centrista ya me quedaba contento. Naranjas de la China, el tío forma parte del Partido de la Coalición Nacional, bastante derechoso, con una historia nada gloriosa, y homologable a los sectores mas carcas de nuestro PP. En una declaraciones a Libération, afirma que se siente representado por la política exterior de Tory Blair (no es un fallo de tipografía) y que el problema de Europa no es ni el desempleo, ni los bajos salarios, ni las políticas sociales: el Problema de Europa es la falta de amor. Es en este momento cuando me planteo si su partido es conservador puro o adopta vertientes de sectas rollos Partido Humanista, niños de Dios o Testigos de Jehová, realmente lo estoy dudando.
LLegados a esto, mejor dejar los ídolos de infancia en su estantería. Que aún resultará que Carlos Sainz es de Fuerza Nueva y yo pidiéndole autógrafos en la salida del Rally Montecarlo de 1989.
Como siga así el asunto, entre las niñas de ayer y nuestro finlandés de hoy, voy a pensar que todos los rubitos son fachas.
11 comentarios
marquinho -
Sam Raimi -
yea -
AXL ROSE -
visita nuestra web !!!
haznos un enlace de nuestra pagina en tu blog y ya verás que guay
no te lo pierdas!!!
Yakov -
el autor -
lara -
Oscar -
marquinho -
sergio -
Yo era fan de Senna... pobrecito...
el autor -
A marquinho: Yo era de Jean Michel Bayle, que se fundió a todos los pilotos yankis en el campeonato EEUU de supercross