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Se me hace extraña la situación. Cogiendo el metro, me encuentro a los últimos borrachos de la noche. Habitualmente suele ser al revés y me encuentran a mí, pero esta vez no ocurrió así. Siete de la mañana del domingo, estoy en Capitán Arenas con Diagonal, los poderes fácticos al alcance de la mano. A 300 metros delante mío, en una ventana indeterminada de dos torres de vidrio negro, un vástago de la monarquía trabaja los laborables. Fantaseo con la posibilidad de que un borbón se presente a las elecciones al comité de la Caixa ¿Iría acaso en algún sindicato monárquico? Tampoco los mayoritarios, por ello, se adhieren a la idea de la República. Caen los primeros ejemplares de La Razón. Son policías de paisano, me indican, estamos muy vigilados por aquí y la Cristina quiere estar segura. La familia Grau es tan pija que quiere que les lleven los diarios a su casa, déjalos en su portería no te preocupes, no hay que subir. Este es un barrio de porteros, que se aburren como ostras un domingo por la mañana pasando frío. Un edificio del gobierno más vigilado que la reserva federal y las torres del imperio Samaranch cuentan con sus detectores de metales y sus porteros en estado de glaciación por aburrimiento y temperatura ambiente. El Corte Inglés exhibe su parafernalia navideña, luces, figuras, pesebres y unas banderas-insignia que intento imaginar, al igual que todos los miles de logotipos de la zona, cambiados por algún símbolo totalitario. El Hilton. Editorial Planeta. L'Illa. Pedralbes Centre. Más policías de paisano. No, hoy El Mundo nos viene sin suplemento, pero si lo desea se lo vendemos igual. Será 1,50, más 1'80 de la Vanguardia. Sí señora, no se equivoca, El País ha subido 10 centimos. El cálculo mental se me da un poco mal, yo fui de letras; pienso para mi mismo: qué muletilla tan usada. Las cabeceras del grupo Correo, ¿o no sabía usted que ABC es del grupo Correo?, idénticas todas, como diría cierto Carlos que unos hectómetros más abajo ocupa un cubículo y estruja entre sus dedos, día tras día, su herramienta de trabajo, un buen puro, nada de baratijas. Se sentiría orgulloso de verme vender tantos ejemplares de su hijito, el buque insignia de Godó. Probablemente si no los doblara con tanto amor, todo ese papel de diario acabaría envolviendo bocatas en el mejor de los casos. Sí mire, aquí estoy, yo también estoy estudiando ¿sabe? pero me queda poco, mi segunda licenciatura y pensando en hacer un posgrado. La burguesía de Pedralbes compra los diarios de dos en dos. Uno se lleva, además del vástago en papel de la estirpe Godó, una copia del Gara, A eso se le llama contrastar. Piensas en los baturros y recuerdas que a escasos metros le volaron la cabeza a Ángel Gervilla, poco antes de comprar el diario donde tú estás ahora. Los del comando iban a por ese señor que tienes delante tuyo, al que intentas imaginar zampando botillo de su tierra en cantidades bíblicas. Los Protagonistas son sus guardaespaldas, no el programa que dirige. Como persona de ideas avanzadas que es compra ABC, El Mundo y La Razón. Una asociación de ideas con el fútbol y los partidos contra la droga me hace sonreír de manera mínima: no ha comprado el Marca, complemento ideal de los neo-cons vestidos de etiqueta que han fundido el montón de La Razón en pocas horas. Los fachas existen, sí, cualquiera diría que son como los marcianos de V, que se camuflan pero tienen debajo la piel de lagarto que les delata. Son como me los imaginaba, ropas caras, pelos teñidos, gafas de marca. Si desea el Atlas del ABC serán 5 euros más. Pase un buen día. El olor a tinta pasa de ser seductor a una tortura para el olfato. Los diarios, de ser una bonita obra de precisión creada en tiempo récord, a un objeto tan poco interesante como toneladas de uva recién recolectadas para un vendimiador emigrante.
Al fin vuelvo a tener un trabajo relacionado con la prensa. Aunque a ojos de la legalidad laboral vigente, aquel domingo lo pasé en mi cama.

3 comentarios

[Ferran - 20 de diciembre de 2004 - 21:02]

¿Alguien ha leido lo mismo que yo? ¡El Toni currando un domingo!
Eso significa que la realidad es más chunga de lo que todos imaginábamos.
Te compadezco, compañero :-P

[ork!gashmo - 20 de diciembre de 2004 - 11:59]

so many assholes... so few bullets.

[Desde Canarias con amor - 20 de diciembre de 2004 - 03:54]

Querido Toni, por fin tienes lo que buscabas, por fin encuentras el curro que ansiabas en el artículo anterior. Te imagino ahí, con tu porte de charnego progre embutido en tu parka y rodeado de artículos, de columnas, de esquelas y de noticias sobre el aumento de la cesta de la compra en navidad, cosas, en definitica, que todo el mundo obvia y que se leen en la laxitud del domingo, con la pata cruzada en el sofá del la salita de estar o haciendo fuerza en el retrete. Por cierto, ¿a que es es curiosa la mezcla de olores entre la tinta de los diarios y la mierda?.
En fín, querido Tony, se ve que tu patrón ha encontrado en tí el candidato ideal para vender periódicos y departir amablemente con esos elementos burgueses, supongo que la mayoría catalanes de pedigrí, que acuden a la cita dominguera con la desinformación.
Supongo que pronto seguiré tu línea y me veré despachando cámaras de video en un bazar hindú de la calle del Castillo.
Así son las cosas nen, estudias pa teniente y te quedas en cabo chusquero. Es la triste crónica del postmodernismo.