Clown Army (III)
Es la noticia de moda en las tertulias de la televisión patria. Todos los noticiarios, los líderes de opinión y demás polemizan acerca del asunto. Muchos ya lo saben por auí, pero como me lee gente en el extranjero haré una sinopsis. La empresa Gas Natural, compañía que fue pública y ahora es privsada de la mano no sé si de PP o PSOE, ha hecho una OPA -digamos que una oferta bursátil para absorver a otra compañía- a la compañía eléctrica Endesa, que también fue pública y vete a saber quién la vendió.
Hasta aquí todo normal. Tanto Karl Marx como otros muchos ya afirmaban que estas concentraciones, en el seno del capitalismo, son normales y la tendencia a la que lleve la competencia. Lo más divertido me parece cuando desde los grandes partidos se intenta darle cierta salsita al asunto que ayude a reforzar el espéctaculo de siglas y de paso contribuir al circo de la política de andar por casa. Dice el PP por boca del marinerito Zaplana que esto es cosa de La Caixa, es decir "de los catalanes", por un silogismo claro de ERC. Yo no me esperaba que algunos partidos políticos tuvieran ese poder tan grande sobre los bancos para forzarles a comprar o vender acciones de manolito o menganito. Menos mal que el señor Josep Piqué, también del PP por lo que afirma al menos su carnet, ha replicado de inmediato al asegurar que esto se trata de algo que ocurre en el mundo de los negocios de manera habitual. Vamos, lo que decía el entrañable tío Karl. Y que se dejen de monsergas: las grandes compañías están dominadas por los bancos, los grandes partidos tienen inmensos créditos con éstos a su vez, y en vez de ser embargados por insolventes, en un pacto no escirto son condicionados por el capital financiero. Y de paso, aparte de sus negocios, viven de nuestras jipotecas, nuestros planes de pensiones, y de la pasta que les dejamos de forma muy alegre en tarjetas, libretas y fondos de inversión.
Ya lo decía Brecht cuando se preguntaba si era mayor delito robar un banco o fundarlo.
Escuchando: We're a happy family - Ramones
Hasta aquí todo normal. Tanto Karl Marx como otros muchos ya afirmaban que estas concentraciones, en el seno del capitalismo, son normales y la tendencia a la que lleve la competencia. Lo más divertido me parece cuando desde los grandes partidos se intenta darle cierta salsita al asunto que ayude a reforzar el espéctaculo de siglas y de paso contribuir al circo de la política de andar por casa. Dice el PP por boca del marinerito Zaplana que esto es cosa de La Caixa, es decir "de los catalanes", por un silogismo claro de ERC. Yo no me esperaba que algunos partidos políticos tuvieran ese poder tan grande sobre los bancos para forzarles a comprar o vender acciones de manolito o menganito. Menos mal que el señor Josep Piqué, también del PP por lo que afirma al menos su carnet, ha replicado de inmediato al asegurar que esto se trata de algo que ocurre en el mundo de los negocios de manera habitual. Vamos, lo que decía el entrañable tío Karl. Y que se dejen de monsergas: las grandes compañías están dominadas por los bancos, los grandes partidos tienen inmensos créditos con éstos a su vez, y en vez de ser embargados por insolventes, en un pacto no escirto son condicionados por el capital financiero. Y de paso, aparte de sus negocios, viven de nuestras jipotecas, nuestros planes de pensiones, y de la pasta que les dejamos de forma muy alegre en tarjetas, libretas y fondos de inversión.
Ya lo decía Brecht cuando se preguntaba si era mayor delito robar un banco o fundarlo.
Escuchando: We're a happy family - Ramones
3 comentarios
Colibrí Lillith -
Desde luego, el título de tu artículo lo dice todo, define muy bien lo que son nuestros políticos desde hace años ya :D
Desde luego es mayor delito fundar un banco que robarlo :)
mia -
Veo que con energías renovadas. Y el Piqué dice eso por qué como en su juventud leyó a Marx algo se le debió quedar.
komanche -
http://redindependence.blogspot.com/
Saludos