El Coche No
Como persona formada en lo ideológico en su adolescencia por el punk patrio, y como minimo aficionado al mundo del motor -no malinterpretar, no me dejo la pasta en tunning ni estoy financiando a plazos un Hyundai Coupé- quiero manifestar mi más enérgica repulsa al estupidísimo anuncio con el que una marca francesa de automoción -antes nacionalizada, ahora privada- nos deleita estos días para hacernos vender su Renault Laguna.
No acabo de entender qué incompatibilidades hay entre querer vivir bien y odiar a la burguesía, a la sociedad -entendida como sistema social, nada de rollo antisocial- y despreciar el dinero -que no quiere decir volver al trueque, sino no concentrar la existencia de uno en amasar inmensas fortunas-. Es probable que precisamente por el hecho de que el precio de un Laguna puede costar el sueldo de dos años a un currito normal, más intereses y mantenimiento cotidiano, querramos vivir bien -esto es, en mejores condiciones, y no arrastrarnos en la precariedad. Y por eso mismo, por ese coste, esa imposibilidad, o ese hipotecare hasta las cejas, odiamos a la burguesía, a la sociedad, y despreciamos el dinero. O al menos es mi caso y el de cuatro subversivos trasnochados que aún quedamos.
En todo caso, me es igual. Cojo el metro a diario y hago las largas distancias en transporte colectivo -y de momento, público-. Lo que me molesta es que una cohorte de eunucos mentales hayan ideado semejante bobada.
Lo dicho, ni caso. Si me disculpan, voy a ponerme la discografía entera de La Polla Recods.
Escuchando: Venganza - La Polla Records
No acabo de entender qué incompatibilidades hay entre querer vivir bien y odiar a la burguesía, a la sociedad -entendida como sistema social, nada de rollo antisocial- y despreciar el dinero -que no quiere decir volver al trueque, sino no concentrar la existencia de uno en amasar inmensas fortunas-. Es probable que precisamente por el hecho de que el precio de un Laguna puede costar el sueldo de dos años a un currito normal, más intereses y mantenimiento cotidiano, querramos vivir bien -esto es, en mejores condiciones, y no arrastrarnos en la precariedad. Y por eso mismo, por ese coste, esa imposibilidad, o ese hipotecare hasta las cejas, odiamos a la burguesía, a la sociedad, y despreciamos el dinero. O al menos es mi caso y el de cuatro subversivos trasnochados que aún quedamos.
En todo caso, me es igual. Cojo el metro a diario y hago las largas distancias en transporte colectivo -y de momento, público-. Lo que me molesta es que una cohorte de eunucos mentales hayan ideado semejante bobada.
Lo dicho, ni caso. Si me disculpan, voy a ponerme la discografía entera de La Polla Recods.
Escuchando: Venganza - La Polla Records
2 comentarios
brocco -
Zenia -
En la sencillez hay un gran valor. Reza un refrán que la abundancia da arrogancia.
Hasta pronto.