Party with me punker (III)
Aquellos maravillosos años en que comíamos crêpes y íbamos a conciertos de hardcore metal
Ser de eso que llaman una tribu urbana es un auténtico peñazo. O debe serlo. O no sé lo que supone ahora. De todos modos, en su momento es aquello que en plena adolescencia llena el hueco vital de saber qué se es y cual es tu identidad. Pero lo que colma tus expectativas acaba siendo la asunción de los peores clichés y los peores roles sociales: sectarismo, exclusión de todo aquello que es o no auténtico o a seguir, consumismo –frustrante en las clases bajas- y prensa rosa, mucha prensa rosa.
Eso por no hablar de otros males, como la penetración interesada de según qué escenas, o estéticas, por profesionales de la política con claras intenciones proselitistas. Sin ir mas lejos, se habla mucho de la infiltración del Nacional Front en los incipientes skinheads británicos a finales de los 70, pero otros casos no dejan de ser más curiosos, como los Teddy Boys apaleando negros por diversión en los años 50. En mi caso concreto, esto vino por el lado opuesto del espectro político, vía cierto grupo de la extrema izquierda que acabó siendo acogido con recelo por bastante gente con el paso del tiempo, incluso por los que podíamos ser algo más proclives a su mensaje o aliados potenciales.
Sin embargo, con los años también se recuerda lo mejor: conciertos auto-organizados, grabaciones caseras, el sueño de hacer giras. Amistades que trascienden los años, y incluso el verse furtivamente en un video de youtube, como asistente a una ruidosísima actuación de unos colegas del barrio, en una impagable actuación que hicieron disfrazados como si de miembros de una banda black metal se tratara.
Al final si uno tiene un poco de dos dedos de frente y algo de personalidad acaba obviando según categorías. Pero eso sí: sin renegar. como digo mi colega Manu, nunca te fijes de nadie que cambia de club de fútbol, porque eso demuestra que estás ante alguien sin principios. Pues eso.
Y a ver si me ven en el citado vídeo, ahí arriba. Esta vez no hay premio.
4 comentarios
Colibrí Lillith -
Poco a comentar, te doy la razón y ya está xD
En el vídeo se te ve fácil... jovencito, jeje
marianosuperstar -
Yo era rapero, pero de los de antes, de los buenos (como no podía ser de otra manera).
Que auténtico el conciertazo. Keep It real!!
Kali -
Por cierto toni, he de decirte que te veo amariconao, cuando saltan las ostias tu te apartas y miras desde la distancia. No como ese que va vestido como si fuera del wrestling mejicano.
Venga un saludo, punk!
mia -